Llega el verano y vuelven antiguos problemas. ¿cómo darle de comer a l@s menores en situación de pobreza?.
En los ayuntamientos por el "cambio" vuelven a dar la misma solución, abrir en verano los Comedores Escolares.
Las soluciones para situaciones de emergencia social no pueden perpetuarse en el tiempo, porque entonces no estamos ante una emergencia, sino ante problemas estructurales que no hemos sabido resolver.
Parece que verano tras verano, no se nos ocurre otra solución que pelear con la derecha para convertir los Comedores Escolares en Comedores Sociales encubiertos. Y eso es lo que aportamos de progresismo a nuestras políticas sociales.
No estoy de acuerdo en esto por varias razones.
¿detrás de cada menor que pasa hambre hay una familia que pasa hambre?
¿por qué l@s menores en situación de pobreza no pueden comer en verano con su familia como hacen nuestr@s hij@s, sus amig@s y compañer@s de colegio?
¿por qué en verano han de ir al colegio para poder alimentarse? ¿no es eso estigmatizar a es@s menores?
Aunque se revistan estos comedores, de "escolares" o de "campamentos", son comedores para pobres.
Llevamos años con esta lacra y ha habido tiempo para pensar otras alternativas inclusivas, basadas en el derecho y no en una caridad edulcorada.
Lo siento, veo esta medida como la cara amable de la caridad ejercida por la derecha, que reparte en colas humillantes la milésima parte de lo que roba.
Pero la izquierda del "cambio" poco cambio está ofreciendo con medidas como esta. Abrir los Comedores Escolares no es como para sentirse orgullosa.
El otro día, nuestro querido alcalde pepero, el Señor de la Torre, se mostraba muy sonriente, satisfecho y orgulloso en la inauguración de un Comedor Social, el de los Ángeles de la Noche.
Quizás se sentía orgulloso de haber conseguido que cientos de personas, que venían comiendo en el suelo durante años, coman ahora en una mesa bajo techo. Miles de fotos hay en internet sobre esta humillante realidad.
¿es para sentirse orgulloso o sentir vergüenza?
¿es para aplaudir o para criticar?
Cientos de personas duermen en nuestras calles, bajo los puentes, derribos,... ocultos. Con los Comedores Sociales ocultamos las vergüenzas de esta sociedad, quizás esa es la satisfacción de nuestro alcalde, ha logrado ocultar lo escandaloso que es ver comer a personas en el suelo, delante del NH.
La izquierda deberíamos pensar que no todo es "darle de comer al hambriento", que está bien, hay que pensar como dar respuestas alternativas e inclusivas.
Y también, tener clara la diferencia entre caridad y derecho, porque en ello nos jugamos la dignidad de las personas, un bien muy valioso, que si es quebrantado nos predispone a estar agradecid@ a la mano "bondadosa" que nos da, una pequeña parte de lo que nos ha robado -ver Amancio Ortega cuando hace donaciones a asociaciones caritativas-, haciendo sumisas a las personas, mientras que si hablamos del derecho a la alimentación, de otra cosa hablamos y de otra forma habría que estructurar la atención.
Igual que no veo la razón para que el señor de la Torre, defensor de las políticas neoliberales que generan pobreza, se sienta contento, tampoco la veo para que la izquierda se sienta orgullosa de abrir comedores estigmatizantes, que van a marcar a l@s menores en la formación de su conciencia social.
L@s menores, en periodo no lectivo, deben comer con su familia y la alternativa debe estructurarse con esa máxima.
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